El Resumón profesionales en la desinformación

lunes, 9 de marzo de 2015

Aguante Santiago Morning, Magallanes y Barnechea

                                                Estadio seguro vs barra brava de Santiago Morning (????)
Como algunos de ustedes sabrán, desgraciadamente soy hincha de la Universidad Católica, club protagonista de  todos los torneos, hasta que llegan las horas de definiciones. Es como Pelluco de Amores de Mercado: 90 capítulos protagonista, y al final, se muere injustamente #carnet.
Bancarme los chistes repetidos y fomes sobre el frío es una prueba  a mi tolerancia.  Puedo decir con certeza que me acostumbré y que ya no me afectan esos comentarios. De todos modos, PODRÍAN EXIGIR MÁS A SUS ESCASAS NEURONAS Y HACER CHISTES NOVEDOSOS SOBRE LA CATÓLICA, MONTÓN DE WEONES.
Y hueviar al hincha rival es parte del fútbol. Me he visto muchas veces riéndome de hueveos contra la UC. Dije hueveos, no huevos, aunque igual es chistoso en el caso de la UC.  
Una buena talla es una buena talla, acá y en el Festival de Viña  del Mar.
Pero otra cosa es el hincha termocéfalo. Ahí donde entra en mí un debate: ME GUSTA EL FÚTBOL, PERO ODIO A LOS HINCHAS DEL FÚTBOL.
Y claro, el fútbol no sería el deporte que es si no fuese por los hinchas. Sin hinchas sería un pseudodeporte, como el lanzamiento de la bala, el béisbol o el taca taca.
Me molesta mucho el termocéfaleo constante. Esa capacidad de apagar el cerebro solo para hacer comentarios sobre  las madres, zorras, monjas y papayeros. Perdón, no debí incluir a los papayeros.  Deportes La Serena es una falta de respeto al fútbol nacional.
En ese sentido el fútbol y la política se hermanan de forma notable.
No hay fútbol sin partidos, ni política sin partidos. En el fútbol el empate es un resultado que beneficia a ambos equipos, y en la política empatar con el rival beneficia a los dos bandos. Aunque claro está, empatar en el fútbol es mucho menos nefasto que andar empatando con el rival político para determinar quién es menos ladrón. Eso es como un 0 a 0 en el fútbol.
 Pero por sobre este juego de palabra digno de una canción de Arjonas, lo que más une a la política y el fútbol es el personaje termocéfalo.
¿Cómo así? La derecha le tira mierda a la izquierda por cualquier cosa. La izquierda responde de la misma forma. De encontrar algo bueno en el contrincante, nada. La idea es desmerecer. Lo mismo pasa en el fútbol ¿Acaso no han visto una pelea entre un “zorra” y una “madre”? Es como ver pelear a un UDI y a un PS. Cero argumentos,  la idea es tirar caca. Siempre mirando pal lado para ver defectos y sacar ventaja, más que mirarse a sí mismos para encontrar ideas y reflexiones que aporten. 
Bueno, esta relación no es solo metafórica, ya que se sabe que los comandos en tiempos de campaña se alimentan de los barristas para ejecutar sus prácticas antideportivas- antipolíticas. Son la misma weá.
Y por ese motivo ya no soporto la política. En serio no pueden debatir de verdad.  Carecen de hidalguía para encontrar algo positivo en el “rival”. Cómo van a construir un país, sin escuchar y solo buscando sacar ventajas pequeñas de la falencias del otro. Se sacan los trapitos al sol de Penta y Caval, y en eso se la llevan, tratando de demostrar cuál caso es menos malo.
Menos mal en el fútbol hay menos en juego, pero en el fondo es lo mismo. Los hinchas convierten este deporte en algo imbancable. Hablan solo del choque de Herrera y del el “estadio de Pinochet. Comienzo a no soportar el fútbol por esos wnes.
Me siento a ver todos los partidos en un canal mierda como el CDF HD, donde dan partidos sin HD (putos). Disfruto de los goles,  los casi goles  y malos cabros. Y al final  todo se va al carajo cuando veo en las redes sociales las discusiones entre los hinchas termos.  Una mierda.
Por eso creo que Santiago Morning, Magallanes y Barnechea son clubes perfectos. Tienen tan pocos hinchas, que es difícil hallar una pelea termocéfala de uno de ellos. Además,  no los van a castigar por tener “hinchas protagonistas”.
Nada mejor que sentarse a ver un Magallanes – Santiago Morning en el Estadio Santiago Bueras. Solo es fútbol, nada de hinchas  tirando weás a la cancha o encendiendo bengalas. La calma interrumpida solo por los cánticos y  la música de la  bandita de Magallanes.
Ahí está el fútbol que me gusta. El que se vive dentro de la cancha y el que se disfruta fuera de ella, lejos de pelmazos buscando fama sin mérito alguno, o armando discusiones sin sentido.

Ah, y por cierto, de seguro están pensando: de qué te quejas, si en la UC son 50. 

2 comentarios:

Fox dijo...

SEGUNDÓN PECHO FRIO JAJAJA

yk dijo...

gracioso