¿Aracnofobia?

                                                Iba a pone una foto de una araña, pero no pude.

Era una noche como cualquiera. Estaba reflexionando sobre la vida: “al final, solo somos un punto azul pálido en el universo”, concluí…

Miro el techo, buscando más respuestas, y justo veo algo raro ¿Será una mancha? O puede que sea una sombra, o un  hoyo negro que se localizó justo entre yo y el techo. Talvez es un problema ocular. En una de esas tengo cataratas.

Miro con mayor detención, intuyendo  lo que se venía…

Es una ARAÑA, es grande, mide como seis metros, podría ser más mortal que el ébola.

Evalúo por varios minutos la situación. Podría dejarla con vida. Quizá tiene hijitos arañas que dependen de ella. O es una líder de opinión o dirigente de alguna secta de arañas.

Podría amenazarla y esperar que se rinda por las buenas, para que salga por la puerta o la ventana. 

Talvez es una oportunidad. Es lo que faltaba para decidirme a cambiar de casa. O quizá sea la ocasión para aprender a distinguir entre una araña de rincón y una araña tigre. En realidad, no estoy dispuesto a googlear imágenes de arañas.

 Finalmente decido optar por lo sano: MATARLA. No podría dormir si queda viva.

Me subo a la cama con mi zapatilla en la mano, trato de no mirarla a las patas, y le pegó como si fuera el DT de la CATO…

Mi vida pasa en un segundo, y tuve que rellenar con sueños erótico (he desperdiciado mi vida). La zapatilla golpea el techo,  pero le erro a la araña (#aweonao), y la veo caer en cámara lenta hacia mi cama. Ni Tomás González hizo una pirueta tan espectacular como la que hice para saltar de mi cama a un lugar seguro…

CTM... ¿estará herida de muerte? Miro la zapatilla y nada. Ningún registro de ella.

 Respiro profundo,  muevo el cubre cama y.... NADA.  El corazón me salta demasiado, debo actuar con rapidez…

Tomo aire y muevo la frazada... Y comienza a correr  más rápida que Usain Bolt... Agarro mi zapatilla, y cuando está en MI ALMOHADA, sí, MI HERMOSA ALMOHADA, LA QUE MUERDO BABEO TODAS LAS NOCHES,  le pego y la tiro  contra el suelo...

SIGUE VIVA la muy ctm. Y peor, ahora  se arranca por abajo de la cama. Le vuelvo a pegar. Parece que está muerta, pero decido rematarla, en un acto humanitario o aracnitario(?).

Sé que está muerta, sé que todas las arañas se van al cielo, pero acá estoy, escribiendo desde la puerta de mi pieza, mirando mi cama, recordando como la araña corría por mi frazada, sábanas y almohada. Me da escalofríos.

Miro las paredes, y cualquier irregularidad me hace sospechar lo peor: las hijitas arañas vendrán por mí.  O quizá la secta de la que era parte, me quiera para un sacrificio.

La maté, pero igual parece que no podré dormir…

¿Tendré aracnofobia?

Esta historia NO continuará…

(Entrada dedicada a la memoria de la araña que hice cagar)

Pd: me dijeron que una forma de superar la fobia es afrontarla, así que ...

                                                La foto de la araña en mi techo  *se desmaya*

(Entrada dedicada a la memoria de yorkeem(?) )