vamoh,
vamos chileeeeeeeeeeenos, que esta nooooche...(8)
Existen muchas maneras de llegar al cielo, entre las que están dejarse manosear por un curita, culiarse a un curita, usar cadena de oro con un crucifijo, ir a misa todo los domingos todo los domingos(8), ser UDI, matar a un UDI, fumarse un pito, tener un orgasmo, ser astronauta, ayudar a una viejita a cruzar la calle aunque no quiera, quitarle las llaves del auto a Eliseo Salazar, prestarle plata a Zamorano, comprar un disco de la Kel Calderón, ir a estudiar a México, romperle las piernas a Felipe Flores o simplemente pedir perdón antes de morir.
Pero los chilenos tenemos nuestro propio camino y exclusivo al cielo: LA
TELETÓN.
El primer aviso que se aproximaba la Teletón son los comerciales de los
productos que alardean de su generosidad con algún rostro de teve dispuesto
hacerlo gratis (?).
Luego vienen las profundas discusiones existenciales de quienes van o no
a la vedetón, evento calentón que se exhibe en la madrugada, cuando van algo
así como 6,9 horas de amor, y que uno que otro papito humanitario, e hijo con
la tele en mudo para que no lo descubran, ven en nombre de la solidaridad. La
Teletón somos todos, y por todos, también incluye a los pajeros.
Finalmente aparece el niño símbolo, que con su simpatía se gana el
corazón de todos. Es como si fuera un candidato a algo, porque su cara está en
todos los lugares: postes, paredes, gigantografias, etc.
Y luego de esto, no queda más que asumir lo que viene…
CAMPEONES DE LA SOLIDARIDAD
Cada año que hay Teletón los chilenos nos sentimos los hueones más
solidarios del planeta. Es que es verdad, sólo en Chile la Teletón ha logrado
permanecer tanto tiempo. Otro hecho inexplicable de este país, junto con los 20
años de Concertación, los 17 de
dictadura militar, los 4 años de
gobierno de Piñera y mis 3 años de pololeo.
Pero pensar que la Teletón nos hace los mejores terrícolas y que tenemos
un país Chile en el cielo, es una tontería.
Durante las 27 horas de transmisiones, que en realidad son como 29, son
expuestas en escena miles de historias, cada cual más terrible de la
otra.
El accidente, la malformación de nacimiento, la familia pobre que lucha
por su hijo discapacitado, y miles de casos son mostradas, una tras otras, tal
desfile de cosas que no queremos que nos pasen.
Es decir ¿Necesitamos ser
saturados por miles de historias, para recién levantar la raja e ir a un banco?
¿Esa es la solidaridad de la que nos jactamos?
En Vivo
En Vivo
Don Francisco dando ordenes a un niñito. De eso depende el próximo computo
Y lo peor de todo es que… ¡¡No es suficiente!!
Don Francisco, ya viejo, con cara
de " un día de estos te iré a ver Mandolino", implora a tres
horas del final del evento, para que la gente vaya al banco. Casi casi, se pone
de rodillas, (pero la barriga no lo deja), para ver si a alguien de pena va al
banco.
Y mostramos otro video, de otro caso, de esos que sumado a la música de
fondo, terminan por hacer llorar a todo el teatro Teletón, atiborrado de gente
que de seguro ya fue al banco(?).
Estadio Nacional hasta las banderas, 80 mil compatriotas, y uno que otro
peruano infiltrado, cantando "chileno de corazón", himno
futbolero adaptado como anillo al dedo al evento solidario.
Los rostros de primera línea de la Tv chilena, más unos de TeleCanal y
UCV TV, se dan de codazos para dar el
próximo cómputo. Están trabajando gratis (creo…espero), así que merecen
figurar.
No puede ser, todavía faltan tres mil millones de pesos, lo que para los
wnes de las Isapres , AFP y Bancos, es como el vuelto de la plata del pan.
Pongamos otro terrible video, otra historia de aquellas, otro niñito,
otra familia, otra catástrofe familiar, otra esperanza, más lágrimas.
Sí, me siento miserable, no merezco todo lo que tengo, estas 27 horas de
amor me tienen devastado, desolado, angustiado, con ganas de colgarme del
centro de la Teletón más cercano, así que al fin voy a depositar al banco, a la
cuenta esa 24.500-03, tan fácil de recordar, y tan difícil de
llenar.
La solidaridad al parecer es más difícil que despertar a un diputado en
el congreso.
Ya falta poco para la meta, y llega la empresa privada, que con un
corazón grande entrega 100 millones de peso.
La miserable empresa privada que limpio su imagen durante dos meses
poniendo el logo de la Teletón, y un rostro famoso en sus spot, entrega
mugrosos 100 millones, en horario prime, frente a un estadio repleto, con un
discurso que dan ganas de vomitar: " estamos felices de ser
parte de este hermoso evento". La gente del estadio aplaude, quieren ver
al próximo cantante rápido, mientras el gerente de la empresa se soba las manos
en su casa en la playa ...en Miami...
Todavía falta dinero, y qué
diablos, si cada chileno pusiera 1.200 pesos estaría la meta cumplida.
¿Alguien se ha puesto a pensar cuanta gente aporta en verdad? 3, 4, o 5 millones de personas, quizás menos. Si fuese así, muchos más van a votar que a donar dinero a la Teletón. El resto se sube al carro de " país solidario", posiblemente creyendo que para ser solidario hay que mamarse las 27 horas de transmisiones sin aportar ni uno, o pensando talvez que si ayudo al señor en su silla de rueda a subir la vereda, en un mal diseñado sector para que ellos suban, equivale a $500.
¿Alguien se ha puesto a pensar cuanta gente aporta en verdad? 3, 4, o 5 millones de personas, quizás menos. Si fuese así, muchos más van a votar que a donar dinero a la Teletón. El resto se sube al carro de " país solidario", posiblemente creyendo que para ser solidario hay que mamarse las 27 horas de transmisiones sin aportar ni uno, o pensando talvez que si ayudo al señor en su silla de rueda a subir la vereda, en un mal diseñado sector para que ellos suban, equivale a $500.
La incertidumbre se apodera del Nacional JM, porque la meta está cerca,
pero a la vez lejos.
Se viene el computo
Teletin y su mamá
Banco de Chile se ha comportado a la altura en sus cajas, agradecemos también a Cerveza Cristal, Confort, Coca Cola, Claro, Pan Ideal ... dice Don Francisco, como si fuera un favor el que le hace las empresas por entregar un 1% de las utilidades.
Cómputo final dice de sorpresa Don Francisco. Los rostros de la Teve
criolla corren con desesperación, como santiaguino buscando una micro cuando
caga el metro.
Y se ven zancadillas de unos a
otro. Algunos ya expertos en esto de la fama a costa de la Teletón, esquivan
micrófonos, cables, camarógrafos y utileros de memoria. Otros más nuevos
pierden pisada en esos obstáculos, y el resto no llega simplemente a la meta
para el rostro de tv, estar al lado de don Francisco en el cómputo final.
Lloran a un costado del escenario, no por el computo, sino porque en sus
cuentas personales de ego, no sumaron un peso esta vez.
Mario kreutzberger mete una tarjeta a un cajero (menos mal que este
todavía funciona) que dará el cómputo, que de seguro el director le sopló hace
rato por interno, y los rostros se amontonan, para tratar de salir dentro de la
toma. Cabe destacar lo complejo que es salir en el mismo recuadro que Don
Francisco, tomando en cuenta las dimensiones de su cabeza.
Al final, cuando van 27+2 horas de amor, en la orgía más importante del
país ( algo relacionado con sexo debía poner), la meta se cumple por varias
decenas de millones.
17 mil doscientos …500 mil millones, diez pesos mil. Ni siquiera saben
leer la cifra los weones.
Respiro aliviado y me siento bien, a pesar de que cuando fui al banco
había una cola tan grande que me devolví
a casa (me gasté esa plata en chelas), igual la meta se cumplió, y tengo esa
sensación que todo va a estar bien sin mí, como cuando no voy a votar de
pajero… un voto más, un peso más, da igual.
Todos cumplimos, o algunos pocos por todos, no sé, somos solidarios y es
lo que importa, gracias a 27 horas de historias de vida , empresas y la vedeton..
El monopolio solidario debe ser duro para el resto de las instituciones
de beneficencia que salen en colecta
nacional cada cierto tiempo, sin ninguna relevancia mediática, sin ningún
rostro y ni un segundo de pantalla. La gente de seguro los ve en la calle y pensará:
“ ya aporte en la teletón, de seguro Hogar de Cristo y Coaniquem son
competencias, envidiosos”
CONCLUSIÓN (?)
Al parecer la mejor forma de ser solidario es con un programa de tv que
dure 27 horas, con dos meses de bombardeo mediático, o simplemente, calzándote
cada vez que vas a un supermercado y te preguntan: ¿ Desea donar para
Fundación Las Rosas ?, y uno apurado, dice: “ bueeeeeeno” .
¿Y esa weá es ser solidarios?
Igual creo que la Teletón debe seguir, merece seguir, la culpa no la
tienen los cabros chicos explotados por la tele, ni sus familias desamparadas... La Teletón #esloquehay
La puse al final, porque si la pongo al inicio, nadie lee tanta weá que escribí